‘Abierto por vacaciones VII: Patrik Grijalvo’ Galería Michel Mejuto.

ABIERTO POR VACACIONES es un programa de la GALERÍA MICHEL MEJUTO en colaboración con BilbaoArte, que consiste en ceder el espacio delantero de la Galería a jóvenes creadores becados anualmente para desarrollar su proyecto artístico en los talleres de BilbaoArte. La exposición se desarrolla durante la última quincena de julio, (abierto al público) y a lo largo del mes de agosto, (sólo escaparate).

La Galería Michel Mejuto, que se dedica a la compra/venta y exhibición de obras de artistas de los s. XIX y XX, hace tiempo avalados por la crítica y el coleccionismo, realiza este programa con el deseo de dar la oportunidad de mostrar su obra a jóvenes creadores que en el inicio su carrera, están construyendo el arte del futuro.

Ver en la web de Michel Mejuto.

El fotógrafo Patrik Grijalvo (Bilbao, 1984) expone las últimas piezas de su proyecto “Espacios neutros” en la Galería Michel Mejuto, dentro del programa “Abierto por vacaciones”. Patrik Grijalvo muestra en la galería bilbaína un total de siete piezas, pertenecientes al proyecto que está desarrollando actualmente con una beca de creación en la Fundación BilbaoArte.

Se trata de cinco fotografías de gran formato y dos piezas escultóricas. Las fotografías, impresas sobre dibond, se podrían enmarcar dentro de lo que se ha dado en denominar “pictorialismo fotográfico”, en la medida en que el espectador ha de hacer un esfuerzo por discernir si lo que tiene ante sí son fotografías o pinturas.

Más concretamente, las fotografías de Grijalvo se acercan a cierta abstracción geométrica, ya que en las mismas recrea formas geométricas a partir de fotografías tomadas de detalles de arquitecturas que no somete a retoque digital ninguno, sino que son instantáneas en el sentido procesual del término.

A través de esta estrategia, Grijalvo retrata geometrías con las que convivimos en el día a día, pero en las que no reparamos y que sólo son des-veladas gracias a ciertos encuadres. Dicho de otro modo, ante los espacios retratados por Grijalvo la mirada del espectador se ve obligada a realizar un esfuerzo cognoscitivo: aparentemente se encuentra ante recreaciones puramente geométricas –formales-, sin embargo al conocer que es fotografía, la mirada busca identificar un espacio real y conocido –fachadas, interiores, etc.- desde lo geométrico.

En un viaje inverso al habitual en arte –el viaje de la realidad a la abstracción-, en las fotografías de Grijalvo se llega a la realidad desde lo geométrico. Las formas geométricas no serían esbozos, resúmenes, esquemas, de lo real, sino a la inversa. Lo real es lo que se encarna en pura geometría.

En este mismo sentido, se presentan también dos piezas escultóricas realizadas a partir de fotografías en las que se introduce la tercera dimensión mediante el doblado de la superficie impresa, el dibond. Grijalvo subraya el estatuto ontológico de las fotografías, que ya no son geometrías en el sentido ideal, sino que encarnarían sus propias formas, deviniendo escultura. Aunque, lo que nos viene a decir, es que si escoramos un poco la mirada, caeremos en la cuenta de algo obvio: las fotografías también tienen una tercera dimensión, aunque se limite a los milímetros de su canto.