FERNANDO VÁZQUEZ (Irudika, 2018)

It´s always best when the light is off

Me piden que escriba un texto explicando el trabajo que he llevado a cabo en la Fundación Bilbaoarte y la Maison des Auteurs de Angouleme para esta exposición en la sala Montehermoso de Vitoria. Y yo, educadamente, me rehuso. No quiero explicar nada a nadie porque no creo que haya nada que explicar. Prefiero que tú, amable espectador, amable espectadora, te enfrentes a las imágenes (luces y sombra, al fin y al cabo, que repiten los mismos movimientos una y otra vez) con la mirada desnuda, con el ojo salvaje. Deseo ¡eso sí! que estés alerta a lo que te sucede, atento o atenta a la sensación. Y que no intentes descifrarla con palabras. ¡Nada de palabras! Las palabras son bastones. Y yo no quiero ayudarte a caminar. Quiero que andes por tí mismo, por tí misma. Porque cuando alguien camina solo, una de las cosas interesantes que ocurre, es que aparecen ideas. ¿De dónde vienen las ideas? Eso es un misterio. ¡Ves! Querían palabras y yo te doy una: misterio. Te la doy para que hagas con ella lo que quieras: sácala a pasear, ponla del derecho y del revés o mastícala bien hasta que suelte todos sus jugos.

Con suerte, dentro de algún tiempo, las imágenes de esta exposición te asaltarán, inesperadas, ineluctables. Y te llevarán a otras imágenes, a otras sensaciones, que serán el mejor contexto, el más apropiado, para esto que hoy me piden que explique.